El senador estadounidense Bob Menéndez y su esposa Nadine Menéndez llegaron el miércoles a un tribunal federal para enfrentar las acusaciones de que aceptaron sobornos de tres empresarios de Nueva Jersey, mientras crecían los llamamientos a que dimita de sus compañeros demócratas.

Los fiscales federales de Manhattan acusaron la semana pasada a Menéndez, de 69 años, y a su esposa de aceptar lingotes de oro y cientos de miles de dólares en efectivo a cambio de que el senador utilizara su influencia para ayudar al Gobierno de Egipto e interfiriera en investigaciones policiales sobre los empresarios.

Bob Menéndez y Nadine Menéndez, de 56 años, y los empresarios José Uribe, de 56 años, y Fred Daibes, de 66 años, deberán comparecer ante un tribunal federal de Manhattan hacia las 1430 GMT. Un tercer empresario, Wael Hana, de 40 años, se declaró inocente el martes.

David Schertler, abogado de Nadine Menéndez, dijo que ella tiene intención de declararse inocente y ‘defenderse enérgicamente’ de las acusaciones. Los abogados de Bob Menéndez, Uribe y Daibes no respondieron a las peticiones de comentarios.

Bob Menéndez, uno de los dos senadores que representan a Nueva Jersey, renunció a su cargo de presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, tal y como exigen las normas de su partido. Pero el lunes dijo que permanecería en el Senado y lucharía contra las acusaciones.

Más de la mitad de los senadores demócratas de Estados Unidos -incluido Cory Booker, el senador más joven de Nueva Jersey- han pedido a Menéndez, una voz poderosa en política exterior que en ocasiones ha desafiado a su propio partido, que dimita después de que se develaron los cargos el viernes.

La acusación contenía imágenes de lingotes de oro y dinero en efectivo que los investigadores incautaron en la casa de Menéndez. Es la tercera vez que el senador es investigado por la fiscalía federal, pero nunca ha sido condenado.

Tomado de Cuba Si