El Alto Comisionado de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos (Acnudh), Volker Turk, instó la comunidad internacional a establecer una moratoria sobre el uso de las ejecuciones con nitrógeno.
«Insto a todos los Estados a establecer una moratoria sobre su uso, como paso hacia la abolición universal», afirmó Turk en un comunicado al comentar la ejecución con gas nitrógeno que se llevó a cabo en Estados Unidos por primera vez el pasado 25 de enero por la noche.
Según el funcionario, la asfixia con gas nitrógeno puede constituir «tortura o trato cruel, inhumano o degradante».
«La pena de muerte es incompatible con el derecho fundamental a la vida», concluyó.
El fiscal general del estado de Alabama, Steve Marshall, confirmó que Kenneth Smith fue ejecutado por haber asesinado en 1988 a una mujer inocente a cambio de dinero.
El nuevo método de ejecución por hipoxia de nitrógeno que se utilizó el 25 de enero, en opinión de Marshall, es «humano», «eficaz» y «ofrece un modelo para otros estados».
Varios expertos de la ONU advirtieron a principios de enero que el uso de un procedimiento de ejecución no probado como hipoxia de nitrógeno podría someter a Smith a tratos crueles o, incluso, a «tortura», y violaría, por tanto, la Convención contra la Tortura de la que Estados Unidos es parte.
Smith, de 58 años, llevaba más de tres décadas en prisión y sobrevivió en noviembre de 2022 un intento de ejecución por inyección letal que resultó fallido ante la imposibilidad de colocarle correctamente por vía intravenosa.
Tomado de Cuba Si