Datos publicados por la ONU plantean que hoy más de dos mil millones de personas en todo el mundo, o una de cada cuatro personas, continúan viviendo sin agua potable gestionada de manera segura.
De estos, 106 millones beben directamente de ríos, lagos u otras fuentes superficiales no tratadas, de acuerdo con el nuevo informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En este sentido la ONU insta a países y gobiernos a actuar más rápido y con más audacia para llegar con este recurso a quienes más lo necesitan.
La experta de Unicef, Cecilia Scharp, advirtió que al ritmo actual, la promesa de agua potable y saneamiento para todos los niños está cada vez más lejos.
En cuanto a desigualdades flagrantes en el acceso al líquido vital, el organismo mundial afirmó que las personas en los países menos adelantados tienen el doble de probabilidades que otras de carecer de acceso a agua potable y saneamiento básico.
Las poblaciones rurales, los niños, las minorías étnicas e indígenas están en primera línea, según el informe.
Tomado de Portal Cubasí